Segovia, el padre de la guitarra clásica

Andrés Segovia (1893-1987) es considerado el padre de la guitarra clásica moderna por la mayoría de los estudiosos modernos. 

Muchos consideran, que sin sus esfuerzos, la guitarra clásica seguiría siendo considerado como un instrumento sumiso.

Segovia en su búsqueda de elevar la guitarra a una posición destacada en el mundo de la música, comenzó sus estudios a la temprana edad de cuatro años. 

Su tío solía cantarle canciones y pretendía tocar una guitarra imaginaria. 

Afortunadamente, hubo cerca un luthier y Segovia tomó rápidamente  gusto a la guitarra. 

Aunque desalentado por su familia (de acuerdo con ellos debía ejecutar un "verdadero" instrumento), continuó sus estudios de guitarra. Estableció una meta para la guitarra y él mismo a temprana edad. 

Aquella meta era llevar el estudio de la guitarra a todas las universidades en el mundo, destacarse como intérprete de guitarra, en cada escenario importante, al igual que el piano y violín, y, por último, para transmitir su amor por la guitarra a las generaciones futuras. 

Andrés Segovia, consideraba que sería el mensajero que llevaría a cabo esta imposible misión.

Andrés Segovia tuvo éxito en todos los aspectos.

Dió su primer concierto en España a la edad de dieciséis años, y a los veinte su debut profesional en Madrid. 

Su programa original incluía transcripciones de Tárrega, así como sus propias transcripciones de Bach y otros. 

Muchos de los llamados músicos "serios" creían que Segovia sería el azmereír en el escenario porque la guitarra no había sido hecha para interpretar música clásica.

Pero de hecho, Segovia  dejó fascinada a la audiencia. 

El único problema que había, era que la guitarra no podía producir suficiente sonido para llegar a cubrir toda la sala. 

Años más tarde, Segovia perfeccionó su técnica y animó a los luthiers a experimentar con nuevos diseños y maderas, que podrían aumentar la amplificación natural de la guitarra. 

Con la llegada de las cuerdas de nylon, la guitarra pudo producir tonos más consistentes, al mismo tiempo, ser capaz de proyectar el sonido mucho más lejos.

Segovia tuvo muchos estudiantes a lo largo de su carrera. Entre los más famosos estuvieron Christopher Parkening, John Williams, Elliot Fisk y Oscar Ghiglia. 

Estos estudiantes, junto con los muchos otros, continuaron con la tradición de Segovia, mientras que al mismo tiempo expandieron las fronteras musicales y la presencia de la guitarra clásica,  en el repertorio.

Segovia no sólo transmitió a sus estudiantes su pensamiento, también influyó indirectamente a miles y miles de guitarristas en todo el mundo. 

Él es verdaderamente el padre de la guitarra clásica.