En la música todos los sentimientos vuelven a su estado puro y el mundo no es sino música hecha realidad.
Enviar frase
Arthur Schopenhauer (1788-1860)

sábado, 25 de julio de 2009

Un concierto repleto de sensaciones

"Boletín y Elegía de las Mitas, se llevó todos los aplausos con un Teatro Nacional Sucre lleno, donde la Orquesta Sinfónica Nacional, los coros y solistas interpretaron la obra con una apropiación del sentir indígena. La Obra se repetirá en Loja, Guayaquil, Cuenca y la Habana (Cuba)"



Emmanuel Sifert (director de la OSN)

La noche de ayer, viernes 24 de Julio fue muy especial en cuanto al escenario musical de la ciudad de Quito.

Tuve la oportunidad de asistir al concierto de la Orquesta Sinfónica Nacional del Ecuador, con motivo del bicentenario. El Teatro Nacional Sucre estuvo repleto de un público que supo apreciar la buena música.

La primera parte estuvo llena de colores y sonidos ecuatorianos, un danzante, un vals, un bolero, un pasillo y nuevamente un vals. Obras como "Vasija de Barro", "El lojanito", "Tu no sabes quererme" dieron inicio a una noche realmente mágica.

Tras un breve intermedio vino el plato fuerte de la noche "Boletín y elegía de las Mitas", una cantata Popular de César Dávila Andrade/ Edgar Palacios (música).

Orquesta Sinfónica Nacional del Ecuador

El trabajo en equipo de los coros Pichincha, Universidad de Loja y Universidad Tecnológica Equinoccial fue evidente, la fuerza que pudieron transmitir durante el concierto conmocionó a quienes tuvimos la oportunidad de estar allí.

Dávila Andrade narra de manera conmovedora, cómo nuestros indígenas durante la colonia española, sufrían maltratos y abusos de todo tipo. Por su parte Palacios en cada vibración muestra el lento paso de un tiempo doloroso, por momentos fúnebre y agónico.
Oh, Pachacámac, Señor del Universo,
nunca sentimos más helada tu sonrisa,
y al páramo subimos desnudos de cabeza,
a coronarnos, llorando, con tu sol

A mi gusto personal estos versos, cantados por el Coro, son la escencia de esta obra maravillosa y estremecedora.

Todo el conjunto, la música y letra, me hicieron reflexionar en muchos sentidos respecto de nuestro pasado, fue tanto así, que vi lágrimas entre los asistentes. Más allá del paso de los siglos el dolor de los ancestros sigue y seguirá presente porque es parte de nuestra identidad y corre en nuestra sangre.

María Isabel Dávila

1 comentario:

  1. Coincido contigo. Realmente el espectaculo de ayer fue increible. Casi pocas veces se logra plasmar, en este caso, el llanto lastimero del dolor indigena. Siempre escucho tu programa es excelente y seria chevere que se pudiese transmitir parte de la obra o toda para quienes no pudieron asistir. Saludos Tathiana

    ResponderEliminar